Más «Manu», menos EBAU

FAPA Zamora

En el mes de junio pasado ya hablamos del informe “Manu” (de la matemática y catedrática de Bioestadística de la Universidad de Valladolid Cristina Rueda Sabater), en el que de forma clara y científica expone y demuestra lo injusta y discriminatoria que es la Evaluación del Bachillerato para Acceso a la Universidad (EBAU), (también llamada Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) según la terminología que han elegido las diferentes comunidades, los antiguos la llaman Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) y los más antiguos la conocemos como Selectividad), para los alumnos castellano-leoneses, ya que no da las mismas oportunidades a estudiantes de diferentes comunidades y no es acorde con la preparación de los estudiantes.

Hay comunidades, como Castilla y León, Navarra o Galicia, que salen perjudicadas frente a otras, como Andalucía, Extremadura o Canarias, que salen favorecidas ya que están siendo mucho menos exigentes en sus pruebas. Esto supone que sus alumnos obtienen mejores notas que los castellanoleoneses y con ello mayor puntuación y corte a la hora de optar a una plaza en la universidad.

A pesar de que en los informes PISA (los que evalúan a los alumnos de 4ª de la ESO y que tienen alrededor de 15 años) y TIMSS (los que evalúan a los de 4º de primaria con 9 y 10 años) tienen muy malos resultados, (a modo de ejemplo, los andaluces obtienen de media 30 puntos menos que los de Castilla y León, lo que supone un curso y medio de retraso).

Esto se debe no solo a que los profesores de estas comunidades son menos exigentes con la EBAU, ponen notas más altas y dan un 14 con muchas más facilidades que nuestros examinadores, sino que va más lejos, como muestra el caso de Historia, donde se exigen los 90 “ítems” o temas según se publican en nuestro BOCYL, pero en Extremadura sólo se exigen 33 temas; o en Canarias ponen el listado con 90 temas, pero 30 subrayados en negrita, que son los que el alumno acaba estudiando.

Esta injusticia y desigualdad ha calado en nuestros estudiantes que se han manifestado en nuestras ciudades especialmente Valladolid, Zamora o Palencia, pidiendo una “EBAU justa”.

En junio de 2017 ya apuntábamos que la solución sería: una EBAU única, común, y simultánea para toda España, es decir el mismo día, todos a la vez, consensuado entre las comunidades y con un sistema de corrección igualitario.

Es más, hasta el Presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, coincide con esta solución y ha manifestado que: “Sólo así podrá evitarse la locura que representa un distrito universitario único, en cuya virtud pueden optar a nuestras universidades alumnos de toda España, pero con 17 pruebas de acceso muy diferentes en dificultad, partiendo además de sistemas educativos en las autonomías muy distintos en exigencia y resultados”.

Pero esta ideal solución se nos antoja inviable hoy por hoy, máxime si tenemos en cuenta el estado autonómico actual, ¿imaginan ponerse de acuerdo con la exconsejera catalana Clara Ponsatí?, ésa que esta prófuga en Escocia.

Lo que sí hay que hacer es llevar el asunto a la Comisión Sectorial de Educación para su estudio y plantear que cualquier alumno pueda examinarse en la comunidad que quiera.

Pero mientras estas soluciones llegan y se implantan hay cosas que se deben hacer de manera inmediata. Una de ellas es, aunque no nos guste, pedir a nuestros examinadores y a sus comités de examen que abran la mano ya, y que den a elegir más opciones de temas, es decir, que se pueda escoger el tema a contestar de entre una terna, por ejemplo.

 

Marina Álvarez

Secretaria Federación Zamora